miércoles, 29 de octubre de 2014

La inocencia de la juventud

Cuando era pequeño lo único que me preocupaba fue divertir y disfrutar. Eso es lo que más extraño de mi infancia. Ahora tengo muchas cosas que pensar y no puedo vivir más así, sin preocuparme de nada, ingenuamente. Los deberes, las presentaciones, el trabajo estudiantil para ganar dinero de bolsillo, ahora tengo muchas cosas que hacer y no tengo tiempo para hacerlas. Entonces, si debiera nombrar un lugar que represente un símbolo de bien estar durante mi juventud,  elegiría la mesa de despacho de mi padre. Mi padre tenía, en la época, una habitación para trabajar a domicilio y cuando estaba a la oficina los miércoles y sábados o cuando no estaba simplemente en el despacho, pasaba mi día entero sentado en su silla de escritorio para mirar la televisión o jugar con el ordenador o la Game Boy. Pero podía también pasar horas sin hacer nada y solo sentarme y mirar al vacío.
Actualmente, apenas cinco minutos sin hacer nada me parece un lujo que no me puedo permitir… Las cosas cambian.

« Pierde una hora por la mañana y la estarás buscando todo el día ».
Richard Whately (1787-1863)

Un objeto que representa mi Erasmus


           Si debiera elegir un objeto que represente un símbolo de mi estancia Erasmus, cogería mi diccionario español-francés y francés-español de Larousse. Es un diccionario de bolsillo muy útil y práctico. 
            Lo recibí como regalo de parte de mi hermana Anahide. Al inicio de mi estancia, no lo tenía y cuando oía una palabra desconocida (o quería saber como se dicen los objetos que veía), debía recordar el sonido (o el nombre del objeto en francés) y buscar la definición o la traducción una vez vuelto en mi habitación. Pero a lo largo del día y a fuerza de hablar con la gente o observar el espacio en el piso, en el tren, en la universidad, en la calle, o además en el supermercado, no podía recordarme todas las nuevas palabras.
Después de un mes y medio en Madrid, volví a Bélgica para llevar otra maleta y despedirme de mi familia y amigos como es debido. Mi hermana aprovechó mi breve retorno a Bélgica para regalarme este “manual de supervivencia para estudiante Erasmus”, según sus palabras. Exageró un poco, es verdad, pero lo que sí es seguro es su utilidad práctica y pedagógica evidente. Lo llevaba todos los días y todo el tiempo, incluso durante las fiestas y los viajes.
Además, este diccionario me demostraba los progresos que hacía durante este año escolar: cuanto más pasaba el tiempo, menos lo hojeaba.
Ahora estoy acostumbrado a llevarlo y todavía lo uso aquí, en Bélgica. No hablo más español en la calle pero sigo observando el mundo que me rodea y mi diccionario siempre me acompaña para aprender palabras nuevas en la medida de lo posible.


Olé




Para mi España es el ambiente olé olé. El ambiente festivo, la convivialidad de sus habitantes, el espíritu acogedor, este conjunto de aspectos conjugado con el clima mediterráneo convierte España en el país más plebiscitado por los estudiantes europeos en el cuadro del programa Erasmus con más de 60 ciudades acogedoras como Valencia, Madrid, Barcelona y también ciudades más pequeñas pero tan animadas como Salamanca, Sevilla o Huelva.
            Me acuerdo las numerosas veces que entraba de prisa a mi piso y que solo debía comprar comida para cenar. Lo que nunca podré hacer en Bélgica, lo hacía casi cada noche durante un año: ir de compras y seguir viviendo por la tarde hasta las primeras horas de la madrugada sin sentirme solo o culpable. Se puede apreciar un ambiente amistoso y acogedor que no se puede explicar, solo se puede vivir. Lo que me encantó directamente fue esta perspectiva de la vida a la española, y no necesariamente para salir de fiesta. En España, no hay stress y tienes tiempo después de la tarde para hacer todos tipos de actividades como, por ejemplo, ir a cenar platos tantos ricos en sabores como en cultura.  Por alguna tarde, se podría creer que el tiempo se haya parado.
            El hecho de que la vida (gasolina, alcohol, fruta y verduras,…) sea más barata y que el español sea la segunda lengua materna más hablada en el mundo después del mandarino y antes del inglés refuerza la idea de que España es el país ideal para un Erasmus. 


lunes, 27 de octubre de 2014

Los placeres del paladar

Cuando comí por primera vez la tortilla española, ¡fue una verdadera revelación! Después he podido probar diferentes tortillas hechas por diferentes personas y nunca era el mismo sabor. Hablo de comida cuando hablo de España porque creo que la magia de los gustos representa muy bien el alma de un país, y por supuesto la tortilla es solo una de las maravillas de España. 

viernes, 24 de octubre de 2014

Maño, un poquico más de tiempo porfis!

Mi Erasmus no fue mi primera estancia en España, pero sí que fue la primera vez que estuve en Aragón. Viví durante cinco meses en la ciudad de Zaragoza, capital de la comunidad autónoma de Aragón. Es una ciudad bastante grande, de unos 700 000 habitantes, la quinta más poblada de España. Fue la primera vez que viví en una ciudad de este tamaño, y la verdad es que me ha encantado. Siempre hay alguna cosa que puedes hacer, en cualquier hora del día o de la noche.

La "iglesia" que se ve en la foto se llama "la Basílica de Nuestra Señora del Pilar," edificio muy impresionante que he encontrado inmediatamente muy muy bonito y cuyo nombre hace referencia a la Patrona de Zaragoza, la Virgen del Pilar. Además, la fiesta de la ciudad, que tiene lugar en octubre y tarda unos diez días, se denomina "Los Pilares". Estuve celebrando los diez días sin excepción, no sólo con gente Erasmus sino también con mucha gente zaragozana. Fue excepcional.

Zaragoza es una ciudad del norte, sin acceso al mar, con un clima muy caliente en verano pero muy frío en invierno, sobre todo por el llamado "cierzo", un viento frío y seco que proviene del nor-oeste de España. Aunque es grande, es típicamente el tipo de ciudades en las que el turista belga "alfa", atraido exclusivamente por el mar, la playa, el sol y los chiringuitos nunca visitará en su vida. Y es precisamente por eso que la he eligido como destino de Erasmus. Me acuerdo muy bien de que nadie en mi facultad en Lieja quería ir allí, yo veía a todos luchando para poder ir a Granada, Cádiz o Almería (lo que encontré de verdad bastante ridículo) y por eso he elegido Zaragoza. La verdad que no lo lamento para nada, me enamoré literalmente de la ciudad, de la manera de hablar de la gente, de la naturaleza aragonesa y de esta mezcla de infraestructuras muy modernas con varios testimonios muy impresionantes del pasado de la Corona de Aragón. Esto también es España.

miércoles, 22 de octubre de 2014

España para mí...


Cuando pienso en España hay tantas cosas que decir ... Pero no puedo pensar en España sin pensar primero en Madrid. Viví casi 6 meses allí y están grabados para siempre. Son momentos únicos que creo que nunca voy a volver a vivir en mi vida. Primero, Madrid es como un melting pot. Entre los que viven allí y los Erasmus hay de todas las nacionalidades. He encontrado gente increíble de todas partes del mundo que me han aprendido cada uno de su cultura y de su país. He tomado esta foto durante una cena donde había casi todas las nacionalidades (Uruguay, España, Italia, Grecia, Alemania, Inglaterra, etc). Esa foto represente muy bien España. Además, cuando llegamos allí nos sentimos directamente como en "nuestra casa" porque España es un país muy acogedor, la gente es muy amable, muy sonriente, te ayuda si estás perdido... Claro porque Madrid es MUY grande! Después de 6 meses viviendo allí, todavía no conozco todo porque es demasiado grande. Es una de las ciudades más grandes de Europa. La gente es también muy festiva... las fiestas... Son como una parte de la cultura. En España, se celebra cualquier cosa (que sea una gran fiesta o el hecho de que las clases sean terminadas, siempre hay una buena excusa para ir de tapas, tomar una copa o salir de fiestas). Y eso, sobre todo en Madrid. No se puede encontrar otro lugar con tantos lugares para salir. Como se dice allí, "Madrid nunca duerme" y claro, ahora yo también puedo decirlo. Las discotecas están también abiertas todos los dias de la semana.. Además, a las 3 o las 5 de la mañana en Madrid son como si eran las 3 de la tarde en Bélgica ! De hecho, que sea de día o de noche, hay muchos coches y muchas personas en las calles. Y no solo jóvenes sino también ancianos. A las 11 de la noche o igual a medianoche, todavía podemos verlos en los metros. Es una mentalidad completamente diferente de la que tienen los belgas.  España es también otro modo de vivir. El primer día que llegué, eran las 10 de la noche y mi compañero de piso ya me llevó de tapas. Por supuesto, yo ya había cenado y él no se lo podía creer! Cuando le dije que en Bélgica se cena como a las 7 o a veces a las 6 y media no se lo podía creer porque allí es la hora de la merienda. La comida en España es también muy buena.. Los tapas.. Los montaditos.. Los churros.. Una de las especialidades españolas es el jamón. En Madrid, hay unos museos del jamón en todos lados. También la tortilla y la paella que se pueden cocinar de maneras diferentes depende de la región. Hablando de la cultura, lo que me sorprendió mucho es la importancia del fútbol en Madrid ! Es una gran parte de la vida de la gente. Creo que ahora soy casi una experta del fútbol madrileño...

España tiene también una arquitectura muy bonita. Tuve la oportunidad de visitar unos monumentos muy bonitos, con estilos diferentes muy propios a cada región de España. Se puede pensar que en Madrid solo hay grandes edificios porque es una capital y que es grande, la verdad que sí pero también tiene otros paisajes como montañas y espacios verdes. España es también conocida por el sol y el calor.. Aunque Madrid no tiene playa, tiene tantas otras cosas que no se puede encontrar en otro lugar. Cuando llegamos allí, no queremos irnos pero cuando nos vamos de allí, es la cabeza llena de recuerdos inolvidables... Finalmente, lo habéis entendido todo, echo de menos a España sobre todo a la vida en Madrid!


Primer recuerdo de España


Esta foto para mi no solo representa España, sino también uno de los primeros recuerdos que tengo de este país.

Para entender todo eso, hay que poner las cosas en contexto: somos al final del ano 2009 y acababa de llegar a España para unos cursos de lengua en Madrid. En este tiempo, no hablaba ni una palabra de español, tampoco conocía algo del país, de hecho eran mis primeros días en Europa. Y es la dueña de mi piso, una mujer muy simpática, que me ha hecho descubrir la tortilla española, mi primero flechazo culinario en España.

martes, 21 de octubre de 2014

Esto es España..




Cuando pienso en España, pienso directamente a un amigo que encontré cuando fui de Erasmus : Francisco. Este chico español de 19 años vive en Castilla-La-Mancha, más particularmente en Manzanares, una pequeña ciudad de esta provincia. Con él, vivé unos momentos increíbles que nunca olvidaré. Viajé mucho a través Inglaterra pero también en España. Me hizo descubrir unos paysajes fantásticos de su país : los Molines de Viento en el Campo de Criptana, el Corral de Comedias en Almagro cerca de su ciudad, el Sacro Convento y el Castillo de Calatrava La Nueva, el palacio de Marqués, el Parque natural de las  Lagunas de Ruidera y tantas otras cosas. Su familia me ha acogido de una manera muy amable y tan especial. Encontré a sus amigos y me reí muchisimo. Después, fui a la ciudad donde está estudiando la traducción de momento : Granada.


España para mí



No me fui de Erasmus en España pero tuve la oportunidad de visitar Sevilla con mis amigas durante dos semanas. Visitamos muchos lugares como la Catedral de Sevilla o la Plaza de España. Entre todos estos lugares lo que más me gustó fue el Real Alcazar de Sevilla. Me gustó mucho su arquitectura que testiga de la historia de España.

Tradición culinaria (Charlotte Mouyard)

He elegido una foto de churros o porras con chocolate. ¿Por qué? Porque para mí, España es un país donde se puede comer de todo a todas las horas. Comí esos churros a las siete de la mañana después de la discoteca al lado del río cerca del puente de Isabel II. Me encantan un montón las tapas, pero lo que prefiero son los churros con chocolate. Me gusta ver a los niños comer churros con sus abuelos a las cinco de la tarde. Representan algo social, porque comer churros con amigos es como una oportunidad de conversación con ellos y es por eso que esta foto me hace pensar en todos los momentos que viví con mis amigos. A las ocho de la mañana, vi a recién casados comer porras después de la fiesta de matrimonio, fue muy divertido. 

Charlotte Mouyard . 


¡España, me haces feliz!



Para mí, España es la amistad, los nuevos encuentros… o sea la felicidad. No puedo pensar en España sin pensar en la gente que he encontrado durante mi Erasmus. Ha sido una experiencia increíble que se lo aconsejo a todo el mundo. A lo largo de esta experiencia, me he encontrado con gente maravillosa procedente de toda parte del mundo.  Esas personas han compartido conmigo sus culturas, sus idiomas, sus risas, sus bromas… Sin embargo, también he aprendido a conocer a personas que ya formaban parte de mi vida en Bélgica pero que con las cuales no había tenido suerte de hablar. Quería dar las gracias a España por la felicidad que me procuró y lo sigue haciendo cada día que pienso en mi vida en este país lleno de maravillas y de gente apasionante…

Gessica.


Una sola palabra o una sola foto no bastan para describir un país, es imposible. Por eso, os pongo unas fotos que representan España para mí.



España no es solo sol, playa y grandes ciudades sino también pueblos, montañas y frío (tomé la foto de la nieve el 3 de julio en Almazán). Tuve la inmensa oportunidad de vivir en Soria, una pequeña ciudad (más pequeña que Mons), donde si no hubiera habido la universidad con sus estudiantes, habría solo ancianos y niños. Pero la ventaja es que se puede hacer todo caminando y todo el mundo se conoce. Además, la región rebosa de lugares maravillosos (en las fotos: la puesta del sol al lado de la Ermita de San Saturio que domina el Río Duero y La Laguna Negra).

España es también sinónima de comida. Lo que me gustaba más es que se podía ir de tapas a todas las horas del día y probar productos locales.

Además, España tiene unas tradiciones antiguas y una cultura muy importante.  Las fiestas tienen más o menos importancia según la región (hemos tenido una pequeña Feria de abril pero unas grandes fiestas para la San Juan).

Pero para entender estas costumbres, para entender porque la gente se vuelve loca para monumentos y lugares, para entender porque los españoles gritan en vez de hablar, para entender cómo es posible que la gente sea tan amable, hay que vivirlo.

Hay que hacer la maleta, irse a España y vivirlo.